lunes, 25 de mayo de 2015

Revolución francesa

La Revolución francesa fue un conflicto social y político, con diversos periodos de violencia, que convulsionó Francia y, por extensión de sus implicaciones, a otras naciones de Europa que enfrentaban a partidarios y opositores del sistema conocido como el Antiguo Régimen. Se inició con la autoproclamación del Tercer Estado como Asamblea Nacional en 1789 y finalizó con el golpe de estado de Napoleón Bonaparte en 1799.
Si bien, después de que la Primera República cayera tras el golpe de Estado de Napoleón Bonaparte, la organización política de Francia durante el siglo XIX osciló entre república, imperio y monarquía constitucional, lo cierto es que la revolución marcó el final definitivo del feudalismo y del absolutismo en ese país,1 y dio a luz a un nuevo régimen donde la burguesía, apoyada en ocasiones por las masas populares, se convirtió en la fuerza política dominante en el país. La revolución socavó las bases del sistema monárquico como tal, más allá de sus estertores, en la medida en que lo derrocó con un discurso e iniciativas capaces de volverlo ilegítimo.
Según la historiografía clásica, la Revolución francesa marca el inicio de la Edad Contemporánea al sentar las bases de la democracia moderna, lo que la sitúa en el corazón del siglo XIX. Abrió nuevos horizontes políticos basados en el principio de la soberanía popular, que será el motor de las revoluciones de 1830, de 1848 y de 1871.2

Técnicas de estudio

Las técnicas de estudio o estrategias de estudio son distintas perspectivas aplicadas al aprendizaje. Generalmente son críticas para alcanzar el éxito en la escuela.1 Hay una variedad de técnicas de estudio, que pueden enfocarse en el proceso de organizar, tomar y retener nueva información, o superar exámenes. Estas técnicas incluyen mnemotecnias, que ayudan a la retención de listas de información, y toma de notas efectiva.2
Es una manera formulada que de este modo y bajo esta denominación, se integran y agrupan técnicas directamente implicadas en el propio proceso del estudio; tales como la planificación de dicha actividad, el subrayado, el resumen, la elaboración de esquemas, el repaso, etc.; así como otras estrategias que tienen un carácter más complementario, como pueden ser la toma de apuntes o la realización de trabajos escolares.
En cuanto a la enseñanza de estas técnicas, tanto la psicología del aprendizaje (particularmente la concepción "constructivista" procedente de la psicología cognitiva), como la práctica educativa, coinciden en considerar el modelado y el moldeado docente como las estrategias didácticas más idóneas a la hora de promover un aprendizaje eficaz y profundo de dichas estrategias.
Aunque frecuentemente se les deja al estudiante y a su red personal de soporte, se está incrementando la enseñanza de las técnicas de estudio a nivel de la escuela secundaria y universidad. Existe disponible un gran número de libros y sitios web, que abarcan desde trabajos acerca de técnicas específicas, tales como los libros de Tony Buzan acerca de mapas mentales, hasta guías generales para un estudio exitoso.
Más ampliamente, una técnica que mejora la habilidad de una persona para estudiar y superar exámenes puede ser denominada técnica de estudio, y esto puede incluir técnicas de administración del tiempo y motivacionales.
Las técnicas de estudio son técnicas discretas que pueden ser aprendidas, generalmente en un período corto, y ser aplicadas a todos o casi todos los campos de estudio. En consecuencia debe distinguírseles de las que son específicas para un campo particular de estudio, por ejemplo la música o la tecnología, y de habilidades inherentes al estudiante, tales como aspectos de inteligencia y estilo de aprendizaje.

Los Diez Hábitos de Estudiantes Exitosos










Los estudiantes exitosos tienen buenos hábitos de estudio. Ellos aplican estos hábitos a todas sus clases. Lea acerca de cada hábito de estudio. Ellos aplican todos estos hábitos a todas sus lecciones. Lea sobre cada hábito de estudio. Trabaje para desarrollar cualquier hábito de estudio que no tenga.
Los Estudiantes Exitosos:
  1. Tratan de no estudiar demasiado cada vez.
    Si usted trata de estudiar demasiado cada vez, se cansará y su estudio no será muy efectivo. Distribuya el trabajo que tiene que hacer en periodos cortos. Si toma descansos breves, podrá restaurar su energía mental.
  2. Planifican horarios específicos para el estudio.
    El tiempo de estudio es cualquier tiempo en el que usted haga algo relacionado con trabajo escolar. Puede ser completar lecturas asignadas, trabajar en una asignación o proyecto, o estudiar para un examen. Programe horarios específicos a lo largo de la semana para su tiempo de estudio.
  3. Tratan de estudiar a las mismas horas cada día.
    Si estudia a las mismas horas cada día, establecerá una rutina que se transforma en una parte habitual de su vida, como comer o dormir. Cuando llegue la hora programada de estudio del día, usted estará mentalmente preparado para empezar a estudiar.
  4. Se fijan metas específicas para sus horarios de estudio.
    Las metas le ayudan a mantenerse enfocado y controlar su progreso. Simplemente sentarse a estudiar tiene poco valor. Deberá tener muy claro lo que desea lograr durante sus horarios de estudio.
  5. Empiezan a estudiar en los horarios programados.
    Puede que usted retrase su hora de inicio de estudio porque no le gusta una asignación o piensa que es muy difícil. El retraso en iniciar el estudio se llama "dejar las cosas para más tarde." Si deja las cosas para más tarde por cualquier razón, encontrará que es difícil terminar las cosas cuando necesite hacerlo. Puede tener que apurarse para compensar por el tiempo que perdió al inicio, lo cual puede traer como resultado trabajo negligente y errores.
  1. Trabajan de primero en la asignación que encuentran más difícil.
    Su asignación más difícil va a requerir de su mayor esfuerzo. Inicie con la asignación más difícil puesto que es cuando usted tiene mucha más energía mental.
  2. Repasan sus notas antes de comenzar una asignación.
    El repasar sus notas le puede ayudar a asegurarse de que está llevando a cabo correctamente la asignación. Además, sus notas pueden incluir información que le puede ayudar a completar la asignación.
  3. Les dicen a sus amigos que no los llamen durante sus horas de estudio.
    Pueden ocurrir dos problemas de estudio si sus amigos llaman durante sus horas de estudio. Primero, interrumpen su trabajo. Y no es tan fácil retomar el hilo de lo que se estaba haciendo. Segundo, sus amigos pueden hablar de cosas que lo pueden distraer de lo que necesita hacer. Una idea sencilla - apague su celular durante sus horas de estudio.
  4. Llaman a otro estudiante cuando tienen dificultad con una asignación.
    Este es un caso donde "dos cabezas piensan mejor que una."
  5. Repasan su trabajo escolar el fin de semana.
    Sí, los fines de semana deberían ser un tiempo para divertirse. Pero también hay tiempo para repasar algo. Esto le ayudará a estar listo a iniciar el lunes por la mañana, cuando empiece otra semana escolar.